PROPÓSITOS.

EL PROPÓSITO DE LA EDUCACIÓN Y EL PROPÓSITO DE LA ESCUELA.

¿Cuál creo que es el propósito real de la educación? ¿Personalmente? ¿Para la sociedad española? ¿Para el resto del mundo? Considero que no hay una verdad absoluta que diga cuál es ese propósito, sino que cada persona de este mundo tiene su opinión, mejor o peor pero creo que todas ellas deberían salir a la luz. Con la finalidad de abrir las mentes y ser algo más liberales, ya que no es lo mismo el propósito de una persona europea que una persona asiática.

En mi opinión, hay más de un propósito, ya que con solo uno, me quedaría escasa, y eso no nos conduciría a ningún lado.

La educación ha de tener como propósito el desarrollo moral y psicológico de la persona. Así como hacer de ella una persona libre, culta, interesada, crítica y autónoma.  Todo ello, sin olvidar una buena formación tanto formal e informal, como no formal, con unos valores adecuados a cada edad y a la sociedad en la que se viva. Por ejemplo, un niño que vaya a un colegio con muchos inmigrantes, tendrá que ser solidario, y el valor de la igualdad muy presente.

La educación a su vez, creo que debería de tener el propósito de transmitir valores, de generación en generación. Que esta se vea influenciada por padres, abuelos y demás familiares, como de amigos y conocidos ya que van a estar durante toda una vida yendo y viniendo, enseñándonos formas de actuar, de vivir, de convivir, etc. Junto a estos influyentes, la educación de la escuela, su propósito mayor, debería ser, una educación en una línea similar a la de la familia, es decir, que familia y escuela se ayudaran mutuamente, y de una forma parecida para hacer así que el niño/a no se despiste, ni tenga dudas de cómo actuar, o de cómo comportarse. Destaco, el concepto de la línea similar de educación de familia y escuela, ya que hay padres que consideran que ir a la escuela es solo para la formación académica de su hijo/a, por otro lado, hay padres que piensan que son los profesores los que van a educar a sus hijos, cosa que tampoco es así. No es toda la educación en un sitio, sino en muchos y deferentes sitios, lugares y momentos.

Recalco, en una visión más detallada, que dichos propósitos, en la etapa de educación infantil deberían de estar más acentuados tanto por educadores, profesores, maestros, escuela y familia; ya que es en esta etapa inicial cuando el futuro del niño se empieza a escribir, en un modo u otro. La figura del maestro está muy presente en el niño, de hecho, es a los maestros de infantil los que más recordamos y valoramos por todo lo que nos enseñan y de la forma en que lo hacen, y si la familia contribuye a ese bonito y fantástico recuerdo, harán de la educación algo mejor tanto en común, como individual, como en conjunto, como sobre todo, para sus hijos.